Buscar este blog

sábado, 6 de diciembre de 2025

SUCEDIÓ UNA MAÑANA (Homenaje a Horacio Castillo de Mirta Rivera)

Presentamos este texto publicado originalmente en los Cuadernos del Proyecto Hybris (2024) con motivo del homenaje al poeta, ensayista y abogado argentino ensenadense Horacio Castillo

Ocurrió en la Escuela N' 1 “Bernardino Rivadavia” de Ensenada (ex Nº 6) El 7 de noviembre de 2007, una mañana soleada y de intensa actividad escolar.

Como cada día, me encontraba trabajando en la Dirección cuando anunciaron la presencia de un Señor a quien hice pasar, invitándole a tomar asiento, Se presentó simplemente con su nombre; Horacio Castillo.

De inmediato reconocí con quien había compartido la celebración del Centenario de la Escuela, allá por el año 1984, a ese ilustre que había sido uno de los convocados a pronunciar palabras alusivas.
Casi de inmediato depositó una caja sobre mi escritorio...

“Estoy grande y enfermo - dijo sin preámbulos. - y traje esto, que lo he guardado todo mi vida, para dejarlo en buenas manos”


Al abrirla se dejaron ver sus cuadernos y "Pimpollito”, su primer libro de lectura. Luego me entregó un cuadernillo de hojas cuidadas y relucientes, en el que se plasmaba su trayectoria multifacética.

Dijo que lo hacía con mucha humildad, para que se supiera que esa persona que había alcanzado tantos logros en su vida, había tenido sus raíces en esa Escuela.


Su presencia y voluntad quedaron asentadas en el Libro de Oro de la Institución, y allí permanecerán para siempre.

Aunada a sus méritos Intelectuales, dejó su impronta de caballero: la corrección de sus modales. Basta como ejemplo mencionar que, durante el encuentro, la actividad escolar me obligó a levantarme de la silla en repetidas ocasiones para atender algunos asuntos, y cada vez Horacio se levantó de la suya...

Al tiempo me jubilé y cuando supe de su partida comprendí con más intensidad que su nostalgia y sus recuerdos habían sido muy poderosos. Se fue con su misión cumplida.

Pasaron muchos años. Muchos. Siento que las cenizas de su infancia  quedaron protegidas en la Escuela. Hoy, después de tanto tiempo, vuelven a ver la luz.


Nota de la Redacción: Horacio Castillo (1934-2010) nació en Ensenada, Buenos Aires. Conocido por su profundo amor por la cultura griega, sus traducciones de poetas griegos y su obra poética que fusiona lo mítico con lo contemporáneo. Fue miembro de la Academia Argentina de Letras  y de la Real Academia Española
Su obra poética fue traducida a varios idiomas y recibió importantes premios literarios por su contribución a la literatura. Entre sus libros se encuentran Tuerto Rey, Alaska, Los gatos de la Acrópolis, Cendra, y colecciones como La casa del ahorcado.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario

Translate